SABIDURÍA Y EL CONOCIMIENTO DE DIOS ROMANOS 11:33 ¡Qué grande es la riqueza, la sabiduría y el conocimiento de Dios! ¡Es realmente imposible para nosotros entender sus decisiones y sus caminos! 34 Pues, ¿quién puede conocer los pensamientos del SEÑOR? ¿Quién sabe lo suficiente para aconsejarlo? 35 ¿Y quién le ha entregado tanto para que él tenga que devolvérselo? 36  Pues todas las cosas provienen de él y existen por su poder y son para su gloria. ¡A él sea toda la gloria por siempre! Amén. NTV. El anhelo de los hombres es alcanzar la sabiduría máxima. Algunos piensan que al cultivar la sabiduría pueden llegar a alcanzar el conocimiento y la sabiduría que posee Dios. Con ese anhelo, muchos hombres se preparan académicamente, leen una gran variedad de literatura de diferentes disciplinas académicas. Leen libros de historia, de novelas, de poesías, de biografía de hombres relevantes, de ciencias y avances tecnológicos. Pero por más que lean todos los libros existentes en el mundo, y estudien todas las ramas de las ciencias humanas, jamás podrán alcanzar la sabiduría que posee Dios, por eso nunca lograrán comprender la sabiduría y el conocimiento infinito de Dios y los planes perfectos que tiene para cada una de sus criaturas y su creación misma. Toda Su creación, habla de Su infinito poder, gloria y majestad. Dios con su infinita sabiduría y su omnisciencia, creó un mundo perfecto, pero todo esto cambió cuando el pecado ingresó a este mundo, y con el pecado, también llegaron todos los males que afligen a los hombres. Males como: las enfermedades, el dolor, el llanto y el sufrimiento. También con el pecado, llegó la muerte a este mundo. Pero Dios en su omnisciencia y sabiduría, sabía de antemano todo lo que iba a suscitarse en su creación, por eso también ideó un plan para que nuevamente su creación alcance la perfección con que fue creada desde un inicio. Este perfecto plan, es un misterio para toda la humanidad, en el sentido de que nunca hubiesen sido capaces de planear o concebir algo similar. Incluso después de que el eterno Creador, en su infinita sabiduría, lo concibiera, nunca el hombre hubiese podido desentrañarlo si no lo hubiera revelado por su misericordia. Pero incluso, después de que se lo haya revelado, nunca hubieran sido capaces de creerlo ni de aceptarlo si Dios no hubiera enviado a su Espíritu Santo para que obrara esa fe en sus corazones. Los perfectos caminos de Dios sobrepasan en mucho la capacidad limitada del hombre para comprenderlo correctamente estos designios divinos. Debido a esta limitación de su mente, el hombre frecuentemente cuestiona a Dios por las diferentes situaciones por las cuales debe atravesar en su vida en este mundo, sin pensar que por más que Dios se lo explicase, jamás lo llegaría a aceptar, tal como Dios lo planificó de antemano. El hombre con su mente finita, de ninguna manera está en capacidad de cuestionar a Dios por los planes que ha establecido para cada una de sus criaturas creadas antes de la creación del mundo. Además, las decisiones de Dios son inescrutables: son demasiado profundas para que las mentes mortales puedan comprenderlas plenamente. Los caminos mediante los que dispone la creación, la historia, la redención y la providencia están más allá de la limitada comprensión del hombre. En lugar de esforzarse para comprender o reprochar los perfectos caminos de Dios, los hombres deben esforzarse para aceptar el camino que Dios ha establecido para cada uno de ellos. No solo tienen que aceptar la vida que les tocó vivir, sino que también deben agradecerle, por que sus planes para sus vidas son perfectos, ya que fueron diseñados con Su infinita sabiduría y el conocimiento de todo. El hombre debe comprender que todas las cosas provienen de él y existen por su poder y son para su gloria. Esta comprensión de la sabiduría Divina, debe motivar al hombre a honrar y glorificar con todo su ser a su eterno Creador. Queridos hermanos. La sabiduría y el conocimiento de Dios son infinitos, y ningún hombre está en capacidad de alcanzarlo, por tal razón nunca llegará a comprender sus designios para toda Su creación. Dios es infinitamente sabio, por eso toda la humanidad depende de Él. Dios es la fuente de todo, incluyendo a nosotros mismos. Es el poder que sustenta las leyes del mundo en que vivimos. Y Dios lleva a cabo todas las cosas para la gloria de Él mismo. Hermanos. Es realmente imposible que nosotros con nuestra mente finita comprendamos a cabalidad los designios y los caminos de Dios para nuestras vidas. por eso en vez de esforzarnos tanto por comprender su conocimiento y sabiduría, debemos esforzarnos para darle gloria, honra y loor, porque Sus caminos siempre serán perfectos y agradables para nuestras vidas.